El ejército alemán, a partir del invierno de 1941-42, como consecuencia de la acumulación de bajas en todos los frentes, empezó a sufrir una escasez de efectivos que se fue haciendo cada vez mas crónica.
Debido a la situación en el Frente del Este y a la descomposición del Frente Oeste en verano de 1944, y por tanto, a la proximidad del enemigo a las fronteras alemanas, las autoridades tomaron medidas de emergencia.
Hitler llamó a todos los hombres entre dieciséis y sesenta años para que se alistaran en el Volkssturm (Ejército del Pueblo) en septiembre de 1944. Estos hombres eran el último recurso para defender Alemania y contribuir a la victoria.
Para reclutar a los miembros del Volkssturm se establecieron tres categorías:
a) Hombres aptos para el combate nacidos entre 1884 y 1924, es decir que contaban entre los veinte y los sesenta años, la mayoría de los cuales habían servido e las fuerzas armadas durante la Primera Guerra Mundial.
b) Hombres nacidos entre 1884 y 1924 que por efectuar trabajos especializados no estuvieran prestando servicio militar ya.
c) Hombres nacidos entre 1925 y 1928, desde los dieciséis años hasta los diecinueve y que no estuvieran prestando servicio ya.
Los hombres que trabajaban en la industria de armamentos y que cumplían horarios de setenta y dos horas semanales, sólo asistirían a la instrucción los domingos. Si fuera posible la instrucción se llevaría a cabo en el mismo centro de trabajo.
Según los datos estadísticos, con estos reclutas se podía contar con una fuerza militar adicional de 5 millones de hombres. Martin Bormann era el responsable de todos ellos.
No solamente se enroló a los hombres, sino incluso a las mujeres, siendo ésta otra promesa traicionada por Hitler, de acuerdo a sus discursos de los años treinta en el sentido de que las mujeres no eran soldados y de que no serían empleadas por las fuerzas armadas. Estas mujeres, fueron destinadas como personal de la artillería antiaérea, entre otras tareas.
El brazalete que estos voluntarios portaban rezaba la leyenda: «Deutscher Volkssturm – Wehrmacht» con dos águilas nazis a los lados. Cada voluntario usaba este brazalete, no importaba el trabajo que desempeñara.
Muchos de estos voluntarios nunca habían usado una arma. Recibieron un curso rápido de cómo utilizar todas las armas ligeras de infantería como los K98k Máuser, Panzerfausts, etc. Debían conocerlos todos de modo que pudieran actuar como un soldado:
Las fuerzas del Volkssturm fueron convocadas demasiado tarde y no pudieron ser ni entrenadas ni equipadas adecuadamente. Por falta de tiempo, muchas unidades tuvieron que ser transportados directamente al frente donde se les enseñaba a disparar. En consecuencia, el valor militar de tales unidades era escaso. En Alemania, a diferencia de Inglaterra, el gobierno no tuvo la previsión de organizar las reservas desde el comienzo del conflicto, y cuando lo hizo, era demasiado tarde y la guerra estaba ya prácticamente perdida.
El armamento para equipar al Volkssturm se obtuvo de las armas provenientes del desarme de los italianos, de armas capturadas en diferentes frentes, armas de caza y deportivas y de la producción de fusiles y subfusiles muy simples que fueron fabricadas por la empresa de Carl Walther y por artesanos de toda Alemania. Las unidades recibieron miles de Panzerfausts.
Estos soldados, pobremente armados, no fueron rival para las tropas Aliadas. Muchas veces, estas unidades cuando se enfrentaron directamente a las tropas enemigas abandonaban el combate y acabaron entregándose, o se disolvieron y escaparon en cualquier dirección. Sin embargo no faltaron los casos de heroísmo y de resistencia a ultranza por parte de grupos de niños y ancianos mal entrenados y peor equipados.
Los Volkssturmers fueron enviados a luchar al frente del Este, después de años de lavados de cerebro contra rusos y judíos bolcheviques, ante la amenaza del inminente cruce de las fronteras de Alemania por parte del Ejército Rojo. Muchos de estos voluntarios lucharon careciendo de entrenamiento y equipamiento militar adecuado, falleciendo en grandes cantidades. El Volkssturm fue disuelto junto con el Ejército regular al final de la guerra.
Decreto del Führer sobre la conformación del Volkssturm:
1) Se formarán las Volkssturm, fuerzas de defensa del pueblo alemán, en todos los distritos del Imperio de la Gran Alemania, en las que deberán servir todos los hombres de dieciséis a sesenta años capaces de portar un arma. Defenderán el suelo patrio con todas las armas y los medios a su alcance que parezcan apropiados.
2) Se establecerá la formación y el mando de las Volkssturm alemanas en todos los distritos bajo el liderazgo del Gauleiter. Tendrán a los organizadores y líderes más capaces del partido, de las SA (Sturmabteilung), las SS (Schutzstaffel), las NSKK (Nationalosocialistisches Kraftfahrkorps) y las HJ (Hitler Jugend).
3) Designo a Schepmann, Comandante de las Fuerzas SA, como Inspector para el entrenamiento táctico; a Krauss, líder de Cuerpo NSKK, como Inspector de entrenamiento para la formación motorizada de las Volssturms.
4) A los miembros de las Volkssturm alemanas se les otorgará la categoría de soldados en servicio.
5) La afiliación de los miembros de las Volkssturm alemanas a las organizaciones partidarias se mantiene inalterable. Sin embargo el servicio Volkssturm tiene precedencia sobre todos los demás servicios.
6) El Reichsfuhrer SS, como Comandante de las Reservas, es el responsable de la organización militar, entrenamiento, armamento y equipamiento de las Volkssturm alemanas.
7) Las misiones militares de las Volkssturm alemanas se harán según mis instrucciones por medio del Comandante de las Reservas.
8) Las reglamentaciones militares para implementar este decreto serán emitidas por el Comandante de las Reservas, Reichsfuhrer SS Himmler, las reglamentaciones políticas y organizacionales, según mis instrucciones, serán emitidas por el Reichsleiter Borman.
9) El Partido Nacionalsocialista cumple su más alta obligación de honor ante el pueblo alemán, al dar prioridad en su organización para cumplir con su responsabilidad en esta lucha.
Cuartel General del Führer, el 25 de septiembre de 1944.
Adolf Hitler
VOLKSSTURM. ORGANIZACIÓN, CARGOS Y ESTRUCTURA:
Dado el carácter territorial y político de la nueva milicia popular, la estructura de mando de las unidades estaba intrínsecamente ligada a la ordenación política alemana. Las unidades milicianas se repartían en cuarenta y tres distritos Volkssturm, que coincidían con los Gaue del NSDAP de la Gran Alemania. Al frente de las unidades estaba el Gauleiter o dirigente del NSDAP, que recibía la denominación de Gaubstabführer.
Gau : División territorial del NSDAP (Partido Nazi). Hubo 42 Gau en el Reich y territorios anexionados. El Gau número 43 comprendía la Auslandorganisation (Organización Exterior del Partido Nazi); cada uno de los 42 Distritos del NSDAP era un distrito del VOLKSSTURM:
La Auslandorganisation (Organización para Asuntos Exteriores) se ocupaba de la propaganda nazi y creó, financió y dirigió las agrupaciones nacionalsocialistas de Alemania y de la población alemana residente en el extranjero.
Los Gau se dividían a su vez en varios Kreis, cada uno de los cuales estaba dotado con alrededor de doce batallones, dirigidos por un Kreisleiter, ayudado por un Kreistabführer. Alemania contaba en esa época con novecientos veinte Kreis. Las equivalencias entre el orden político y las unidades militares del Volkssturm se ve mejor en la siguiente tabla:
Por debajo del Kreis se estructuraban otras divisiones organizativas más pequeñas como el Ortsgruppe, que integraba un número determinado de compañías bajo el mando de un Ortsgruppenleiter, responsable de una zona de una ciudad o una región en concreto; el Zelle que a su vez podía englobar a varios pelotones de una unidad y estaba comandado por un Zellenleiter con jurisdicción sobre un territorio equivalente a un vecindario de cinco bloques de casas; y por último el Block, que se reducía a una manzana de casas de una ciudad, donde podían estar desplegadas un número determinado de secciones y que era dirigido por un Blockwart, el cargo más bajo dentro del NSDAP.
Este tipo organizativo del mando también provocó conflictos, al igual que su cúpula directiva. En ocasiones el mando de los Volkssturm chocaba con las decisiones que los militares profesionales de la Werhmacht trataban de tomar. El más claro ejemplo es el del Gauleiter de Berlín y Comisionado del Reich para la defensa de la misma ciudad, Joseph Goebbels, el famoso ministro de propaganda, cuyas fricciones con los militares fueron notorias, aunque también lo fueron con el Gauleiter de Brandemburgo, Emil Stürtz, llegando éste a retirar dos batallones Volkssturm que se encontraban en la ciudad de Berlín colaborando en su defensa.
Se optó por el batallón como unidad estándar de organización debido sobre todo a la falta de suficientes suministros y armas para la creación de unidades mayores.
Los batallones Volkssturm recibían su propia denominación organizativa relacionada con su procedencia. Dicho nombre constaba de dos partes: el número de Distrito al que correspondía, más el número de batallón, éste, correlativo con el de los demás batallones del Reich.
Por ejemplo:
– Batallón 43/400 era el Batallón número 400 adscrito a Dinamarca (territorios fuera del Reich, Gau 43)
– Batallón 25/97 era el Batallón número 97, radicado en Prusia Oriental (Ostpreussen, Gau 25).
El siguiente cuadro explica la composición de las unidades militares del Volkssturm:
Cada batallón había sido diseñado para constar de seis compañías, de las cuales una era de artillería. Cada compañía estaba a su vez compuesta por 4 Züge, divididos cada uno en tres o cuatro grupos de diez hombres. En cada uno de los Züge, se dedicaban al menos la mitad de los hombres a la lucha antitanque, siendo éstos en su mayoría los soldados más jóvenes y los voluntarios de las Hitlerjugend (juventudes hitlerianas).
Estos grupos antitanque que se denominaban “Panzernahbekämpfungstrupps”, estaban equipados con armamento apropiado, como los conocidos Panzerfaust, Panzerschreck, y minas anticarro. Su cometido principal era el combate cercano con los carros enemigos para tratar de detener o ralentizar su avance.
Es significativo la dedicación de estos grupos a un cometido tan especifico como el combate cercano contra los carros soviéticos, representando una clara prueba de la gran inferioridad en cuanto a carros de combate, que sufrían los alemanes en esta fase del conflicto.
COMETIDOS DEL VOLKSSTURM:
Los cometidos para los que primariamente se formaron estas unidades estaban bien definidos. Por orden de importancia eran los siguientes:
– Rodear y contener desembarcos enemigos en las cabezas de playa o también posibles despliegues de paracaidistas.
– Lucha antipartisana. Detención de agentes infiltrados y saboteadores.
– Protección de enclaves estratégicos como puentes.
– Reforzamiento de unidades diezmadas del ejército regular.
– Taponar sectores del Frente amenazados por el avance enemigo.
– Mantener la seguridad de los sectores poco amenazados.
– Responder a las temidas revueltas de los cerca de 10.000.000 de prisioneros que se mantenían en Alemania.
También fueron empleados en otras tareas, como pelotones de ejecución en terreno propio, de partisanos o saboteadores.
Tras el avance soviético, los milicianos eran mantenidos en ocasiones tras las líneas enemigas, esperándose de ellos que cometieran actos de sabotaje y otras acciones de lucha guerrillera. En estos casos, los Volkssturm capturados eran considerados como saboteadores o terroristas por los soviéticos que los ejecutaban de inmediato.
No menos importante era la vigilancia de los campos de concentración, ya que ante los rápidos avances soviéticos, en los campos de prisioneros a veces se sublevaban grupos de presos contra los alemanes, creando problemas en su propia retaguardia.
Otro de los cometidos del Volkssturm era el de elevar la moral del pueblo, haciendo ver de esta forma, que era una guerra de todos ante un enemigo que no respetaría a nadie. Una “guerra total”.
ENTRENAMIENTO:
La preparación que se daba a los reclutas milicianos, se puede calificar muchas veces como improvisada. Tras recibir una apresurada instrucción que duraba cuarenta y ocho horas (las jornadas laborables extraordinarias de guerra duraban en algunos casos setenta y dos horas como la de los obreros de las fábricas de armamento, caso en que se realizaría la instrucción los domingos, y ocasionalmente en la misma fábrica). Se pretendía que los milicianos dominaran el uso del rifle, panzerfaust, panzerschreck, lanzagranadas, granadas de mano, pistolas, minas y subfusiles.
Este entrenamiento a la población alemana evidentemente llegó muy tarde, dándose casos de reclutas que recibían la instrucción en el mismo frente.
No obstante, Alemania también contaba con pequeñas unidades de supuesta defensa territorial, el denominado “Wachdienst”, generalmente integrado por personas que ya no estaban en edad de luchar en el frente y cuyas tareas fueron más bien civiles (como el cuidado de cultivos agrícolas y la fumigación de las cosechas para prevenir posibles plagas), que las propias de una milicia armada.
EQUIPAMIENTO:
Los nuevos combatientes eran equipados con armas de “2ª o 3ª mano” las cuales habían pasado previamente por controles de calidad. También les era entregado material capturado en los diferentes países conquistados por Alemania desde el inicio del conflicto.
El armamento sólo fue suministrado adecuadamente a los primeros batallones formados, los más tardíos carecían incluso de armas o se les entregaban escopetas de caza. A veces, los milicianos desarmados sin posibilidades efectivas de combatir eran enviados a sus casas por los dirigentes del partido.
Un batallón Volkssturm contaba en sus filas entre 360 y 640 hombres disponiendo de un armamento (teórico):
-6 morteros ligeros.
-6 panzerschreck.
-27 panzerfaust.
-Rifles carabina VG 1-5 Volkssturm-Gewerh o Versuchs-Gerat 1-5.
-También usaron el VK98, el VG1, VG2, VG3 y VG4.
-Volkspistolen (pistolas diseñadas para el Volkssturm).
Algo que resulta sorprendente es el diseño de armas especiales “Volkssturm” (Volkssturmwaffen), que fueron escasamente fabricadas como el VG 1-5 Volkssturm-Gewerh o “Versuchs-Gerat 1-5” rifle-carabina del que se completaron algunas unidades en enero de 1945, y se cree que posteriormente fue usado por las guerrillas de “hombres lobo” (Werewolf) que actuaron en los últimos días del conflicto y durante algún tiempo tras la capitulación.
También se idearon otros diseños poco conocidos de rifles, como el VK98, VG1, VG2, VG3, y VG4, e incluso pistolas Volkssturm “Volkspistolen” (ver foto a la derecha de estas líneas), armas todas ellas escasamente producidas.
Las granadas diseñadas para los Volkssturm, fueron unas bombas de mano extremadamente simples y que resultaron más peligrosas para los propios milicianos que para el enemigo.
En cuanto a raciones y suministros, generalmente no les eran entregadas raciones alimentarias, siendo las propias familias de los milicianos las que se encargaban de alimentar a los combatientes.
UNIFORMES:
El uniforme era otra variopinta parte del equipo de un Volkssturm. En la mayor parte de los casos, la única muestra visible de uniforme regular era la banda (brazalete) que los nuevos soldados debían portar en su brazo izquierdo con la inscripción “Deutscher Volkssturm” u otra semejante en la que rezaba la inscripción “Deutscher Werhmacht”, frecuentemente sobre sus ropas personales, ya que aunque se había previsto que con posterioridad fueran entregados uniformes grises del NSDAP y el mismo modelo de casco usado por las tropas de montaña, éstos fueron escasamente proporcionados a los milicianos, que usaban su ropa de civil, monos o ropa de trabajo de los diferentes oficios de los que provenían los reclutas, uniformes anticuados de la Gran Guerra o uniformes fruto de donaciones particulares.
En otros casos dependiendo del Gau, a las tropas les fueron entregados uniformes de organizaciones auxiliares como la NSKK, la organización Todt (encargada de construir fortificaciones) o del RAD (Reichsarbeitsdienst, organización de trabajo) e incluso del propio NSDAP.
Aunque se había designado el casco de las unidades de montaña, como casco estándar de los milicianos, también se distribuyeron otros modelos a las tropas Volkssturm, como cascos sobrantes de la Primera Guerra Mundial, cascos de la Policía, en algunas ocasiones los modelos M1935, M1940 y M1942, y también cascos modelo “Luftschutz Gladiator” diseñados para la organización “Luftschutzwarndienst-LSW”, integrada por civiles, cuyo cometido era alertar de ataques aéreos enemigos.
La uniformidad dependía mucho de la zona geográfica y del Gau al que perteneciera el Volksturm.
A pesar de la precaria configuración del uniforme, generalmente los ejércitos enemigos, tanto soviéticos como aliados occidentales, reconocían y trataban a los Volkssturm como a soldados de la Wehrmacht.
En los primeros días del Volkssturm, las campañas de propaganda creadas por Goebbels, consiguieron convencer a muchos mediante impactantes eslóganes de que la derrota podía ser evitada, e incluso de la posibilidad de invertir el curso de los acontecimientos. Seguir la “sagrada llamada del Führer” o “Creer, Luchar y Ganar” y otros muchos lemas mostrados en películas cinematográficas perseguían elevar la moral de los integrantes de la milicia y por tanto sus deseos de combatir por la victoria.
Salvo excepciones, la moral de estas nuevas tropas nunca fue en general muy alta, y sólo aquellos que no tenían un conocimiento realista de los acontecimientos bélicos, creían que la victoria era aún posible. La mayoría pensaban que eran enviados a combatir como un esfuerzo desesperado e inútil.
Muchos milicianos desertaron cuando tuvieron ocasión, regresaron a sus casas arriesgándose a enfrentarse a un tribunal militar y al pelotón de ejecución.
A menudo, sólo los reclutas de avanzada edad que habían servido en el Ejército durante la Primera Guerra Mundial, mostraron un auténtico sentido militar de disciplina, así como los jóvenes voluntarios de las Hitlerjugend (Juventudes Hitlerianas), que atesoraron el mayor número de condecoraciones y acciones meritorias, de las cuales las más conocidas son las que se llevaron a cabo en la batalla final por Berlín contra las tropas acorazadas soviéticas.
Autor: Eport